Breves notas sobre los estudios de la germanística en Cuba

Ediltrudis Panadero de la Cruz

Universidad de Oriente

Cuba

edilpan@fd.uo.edu.cu

José Álvarez Romaguera

Universidad de Oriente

Cuba

pepin@fie.uo.edu.cu

El aprendizaje del idioma alemán y los estudios de Germanística en Cuba constituyen sin lugar a dudas una disciplina no tradicional como otras que sí lo han sido para los cubanos y están muy ligados a la cadena de éxitos de la Revolución Cubana en el campo de la educación.

Antes del año 1959, la enseñanza de la lengua de Goethe era casi nula y no se impartía en ninguna de las tres universidades que existían entonces en el país, esto es, la Universidad de La Habana en la capital, la Universidad de Las Villas, en el centro y la Universidad de Oriente en Santiago de Cuba para la región oriental cubana.

En la época colonial en Cuba, debido a que la reina de España tenía ascendencia austriaca, se institucionalizó la enseñanza del mismo desde 1883 y hasta el 1898 en las facultades de medicina y en el bachillerato.

Después de la liberación de Cuba de la metrópolis española en el año 1898 y durante la pseudo república se continúo con la discriminación de dicho idioma.

Por más de 50 años estuvo el país dependiendo de los EEUU no sólo económicamente sino también política y culturalmente, lo que trajo como consecuencias el tratar de borrar las raíces autóctonas nuestras e implantar así el conocido american way of life. En ese entonces existían en la isla escuelas privadas y estatales, desde luego con mejores condiciones y en mayor cantidad las primeras y las segundas con carencia de todo tipo, recibiendo pocos recursos del Estado, pero en ambas se enseñaba como idioma extranjero el inglés.

Se conoce que para esa etapa neocolonial solo en una escuela norteamericana se enseñaba el idioma alemán, pero durante un corto período de tiempo, terminándose con la enseñanza del mismo al comenzar la Segunda Guerra Mundial. Debido a nuestra total dependencia con la gran América del Norte, no existían posibilidades algunas de estudio o aprendizaje de otros idiomas extranjeros, salvo el idioma francés, que lo aprendía alguna élite de la clase burguesa cubana como algo de moda y muy extravagante.

Con el triunfo revolucionario de enero del 1959, tiene lugar una verdadera transformación en todos los ámbitos de la vida económica, política y cultural del país y sobre todo en la educación que en relación con la enseñanza de las lenguas extranjeras se propone hacerla asequible a todos, para que los cubanos pudiésemos aprender no solo el inglés y el francés, sino también otras lenguas europeas y asiáticas, y es así que se crean en 1961 las primeras escuelas de idiomas para los trabajadores, estudiantes y amas de casa, enseñanza que, consecuente con el nuevo proyecto socialista, tenía lugar de forma gratuita en el horario vespertino y nocturno.

El objetivo de estas escuelas era la adquisición de los conocimientos básicos del idioma en cuestión en un plazo de tres años y medio, impartiéndose los idiomas Inglés, francés, alemán, ruso, búlgaro, checo, portugués, italiano y hasta el chino mandarín, sobre todo este último en la capital del país.

Al terminar los siete semestres que duraban los cursos, el alumno, que no tenía previo conocimiento de ese idioma, podía comunicarse en el mismo de forma aceptable con cualquier persona de esa nacionalidad o que lo hablara, además de obtener informaciones políticas y culturales donde la lengua era vernácula. Durante estos años la gran mayoría de nuestros estudiantes eran profesionales, es decir profesores universitarios, médicos, ingenieros, técnicos, obreros, estudiantes, todos ellos ávidos de dominar una lengua extranjera, surgiendo así el lema de Idiomas para unir a los pueblos y luchar por la paz.

Las motivaciones eran diversas, algunos, sobre todo los profesionales, lo aprendían con el objetivo de realizar estudios de postgrado, investigaciones científicas o doctorados en esos países, o simplemente para tener acceso a la literatura o aumentar su nivel cultural.

En cuanto a la enseñanza del idioma alemán en Cuba se debe destacar la gran ayuda recibida por el entonces ministerio de educación de la República Democrática Alemana, que nos suministró todo el apoyo material y técnico para realizar y lograr dicho empeño, entre los que se puede mencionar, libros de texto, diccionarios, programas y planes de estudio, entre otros, llegando a Cuba en el año 1962 los primeros profesores alemanes del Instituto Herder de la Universidad “Karl Marx” de Leipzig, comenzándose con la formación de los primeros traductores e intérpretes cubanos de idioma alemán y ocurre algo similar en otros idiomas, lo que hace necesaria la creación del Instituto de idiomas “Pablo Lafargue” en la ciudad de La Habana.

Estos primeros estudiantes ingresaban a esta institución con el noveno grado vencido, recibiendo sólo dos años de idioma y luego comenzaban a trabajar como traductores e intérpretes, sin tener como se infiere, nivel universitario.

En el año 1964 se funda el Instituto “Máximo Gorki” lo cual fue un factor decisivo en la formación de los egresados, porque se recogerían las experiencias acumuladas del primer instituto, el “Pablo Lafargue”, que dejaría de existir, pero en esta ocasión los estudiantes recibirían además de los conocimientos idiomáticos más amplios porque se prolongan los estudios a 4 años, las asignaturas del bachillerato, es decir, desde el décimo y hasta el duodécimo grado. Posteriormente a su graduación, los egresados eran ubicados en las escuelas de idiomas como profesores, a lo largo y ancho de todo el país, así como traductores e intérpretes, en algunas instituciones, pero ya con nivel medio superior.

Como se puede apreciar, durante la década del 60 en Cuba todavía no existían estudios de Licenciatura en Lenguas modernas como especialidad en nuestras universidades, que ya alcanzaban la cifra de 30 en el país en sólo 10 años de Revolución.

Es para el año 1971 que se comienza por primera vez en la historia patria, con la impartición de la carrera de Germanística, en la entonces Escuela de Idiomas Modernos perteneciente a la Facultad de Humanidades de la Universidad de La Habana como una disciplina científica. Para ingresar a la misma y continúa siendo hoy en día también un requisito, el aspirante debe ser egresado del bachillerato o en aquel entonces del Instituto“Máximo Gorki”. Estos estudios tienen una duración de 5 años y los alumnos reciben además de la práctica integral del idioma alemán, otras asignaturas como lo son: gramática, fonética y fonología, lexicología, literatura, traducción e interpretación, didáctica, paiseología, por sólo citar algunas. Los egresados trabajan al culminar la carrera, en perfiles como profesores, traductores e intérpretes, guías de turismo, entre otros.

En el año 1977 se reabrió el Instituto “Pablo Lafargue” para que este se ocupara sólo de la formación de los Traductores e Intérpretes, quedando así en la facultad de Humanidades la formación de los profesores.

Igualmente en este propio año se funda en Cuba la Asamblea Cubana de Estudios Germanísticos, para todos los profesores, guías e intérpretes y traductores de dicho idioma y desde el 1978 pertenecemos a la Asociación Internacional de Profesores de Alemán, lo que nos permite la constante superación y actualización de nuestros especialistas.

Un momento de relevancia fue cuando en 1976 se crea la facultad Preparatoria en Ciudad de La Habana y en 1983 en Santiago de Cuba; las mismas tendrían a su cargo la formación en idioma alemán de estudiantes y profesionales, que realizarían estudios universitarios en la República ex Democrática Alemana, los primeros y los segundos cursos de postgrados, maestrías, doctorados, entrenamientos, estancias de investigación, de intercambio académico y otras.

Estas facultades desaparecerían con la caída del muro de Berlín en 1990 y sus profesores se integrarían a las facultades de Humanidades de sus respectivas universidades, pero Cuba continuó y continúa los vínculos con la República Federal Alemana, RFA, brindando esta un apoyo necesario para proseguir con la enseñanza del alemán en Cuba.

Actualmente se mantiene la enseñanza de este idioma en todo el país en escuelas de idiomas con una duración de 4 semestres y en cuatro universidades, de La Habana en la capital, la Universidad Matanzas, de Las Villas, y la Universidad de Oriente en Santiago de Cuba se imparten cursos de postgrados básicos, medio y superior, tanto para estudiantes como para profesores que su perfil lo requiere para su formación y superación, y como idioma optativo curricular junto al francés en la carrera de Lengua y Literatura Inglesa y Licenciatura en Turismo.

Existe la carrera de Lengua y Literatura Alemana en la Facultad de Lenguas Extranjeras de la Universidad de La Habana, con una duración de 5 años y varias generaciones de graduados hasta la fecha.

Tenemos asimismo una cátedra “Alexander y Wilhem von Humboldt” perteneciente a la Universidad de La Habana, que aglutina a todos los profesores de la isla y organiza eventos tan importantes como la Primera y Segunda Conferencia Internacional de Profesores y Germanistas de Cuba, donde hemos contado con la participación de cientos de invitados extranjeros europeos y de Centro América, Suramérica y el Caribe; el Primer Coloquio Internacional de Germanística Cuba-México, por sólo citar algunos ejemplos de los trascendentales foros científicos convocados y organizados por la citada cátedra.

En el 2006 se realizó por primera vez en el Caribe en La Habana, Cuba, el 12 Congreso de la Asociación Latinoamericana de Estudios Germanísticos, obteniendo Cuba la presidencia por 4 años de esa asociación, cuestión esta que nos prestigia y no es más que el reconocimiento internacional ganado por nuestro país en la enseñanza de este idioma.

En estos momentos, muchos profesores cubanos hemos cursado de forma satisfactoria el curso de nivel superior de alemán del Instituto “Goethe” en la República Federal Alemana, y se avanza en la obtención del grado científico, siendo ya significativo el número de ellos que poseen el Título de Doctores en Germanística y es Cuba dentro del Caribe, América del Norte y del Sur, la que posee mayor cantidad de Germanistas y profesores de alemán en la región teniendo en cuenta su número de habitantes.